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Arquitectos: Christensen & Co Architects
- Área: 11500 m²
- Año: 2023
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Fotografías:Niels Nygaard
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Proveedores: NBK North America
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Un epicentro comunitario para el aprendizaje. Aprendizaje y comunidad. La nueva escuela en Amager, Copenhague, es una casa abierta y acogedora, donde cada centímetro de la arquitectura ofrece espacios para el aprendizaje. Una característica central de la escuela es la zona de ocio, que hemos tejido en el tejido de la ciudad al dejar que la arquitectura de la escuela se funda con el área circundante. La zona tiene múltiples funciones que invitan a los transeúntes a interactuar con la escuela. Hacia la calle, hemos diseñado el edificio como arquitectura comunitaria con grandes escaleras que funcionan tanto como plataformas de asientos como espacios para hacer ejercicio.
"Existe un flujo y un beneficio visual inusual del diseño interior de la escuela. El proyecto muestra una gran comprensión de las nuevas formas de pensar y los espacios de aprendizaje. Esto se muestra especialmente en la planta baja donde se encuentran la zona de juego y el auditorio abierto". Descripción de cómo las posibilidades de movimiento y flexibilidad están integradas en la arquitectura de la escuela, según los comentarios del juez sobre el proyecto ganador.
Un jardín urbano. Las escaleras exteriores crean una transición perfecta entre el paisaje urbano y la arquitectura escolar. A medida que los usuarios locales suben las escaleras, se abre un espacio de juego al aire libre por encima del ruido y el tráfico de la ciudad. Aquí, la comunidad local puede disfrutar de un descanso bajo árboles de tamaño completo mientras los niños se divierten en los juegos y los muros de escalada. Cuando llega el momento de bajar, los lugareños pueden tomar las escaleras o usar el tobogán, que serpentea de vuelta al nivel de la calle.
Una versión moderna de la arquitectura comunitaria Además de ser una escuela organizada para facilitar entornos de aprendizaje ideales, la escuela también funciona como centro de actividades extracurriculares para adultos y niños por igual. Así, en la planta baja, la escuela ofrece fácil acceso a un gimnasio, talleres, espacios de creación y un auditorio. Aquí, hemos diseñado la arquitectura de manera que facilite un entorno social vibrante para actividades como conferencias, manualidades, conciertos y reuniones comunitarias.
Una escalera unificadora. Para dejar entrar la luz del día, hemos creado un atrio interior con tragaluces y una gran escalera para sentarse. La escalera abre el resto de los pisos de la escuela para los alumnos. Al subir por los niveles, los alumnos estarán más protegidos del mundo exterior. Al crear esta conexión vertical, hemos organizado la arquitectura de modo que los alumnos más jóvenes tengan su vida diaria más alejada de las bulliciosas calles, garantizando así un entorno de aprendizaje seguro.
